"No puedo ocultarle a Abraham lo que voy a hacer," (Génesis 18:17)
Abraham era conocido como "el amigo de Dios". Los amigos se cuentan las cosas y lo que planean hacer, especialmente cuando se trata de cosas importantes o decisiones que tomar.
Cuando Dios pensó hacer juicio sobre Sodoma y Gomorra por causa del pecado se lo contó a Abraham (Génesis 18:20-33) Allí los dos entablaron una conversación de confianza, abierta y atrevida.
En esta ocasión tampoco Dios quería ocultar lo que Él iba a hacer con Abraham y su descendencia, porque lo consideraba su amigo.
Si estamos dispuestos a relacionarnos con Dios debemos considerar que Él siempre está dispuesto a ser nuestro amigo. Él quiere hablarnos y también escuchar lo que tenemos que decirle.
Disfrutemos de nuestra intimidad con Dios y acerquemos libremente para contarle nuestros planes y escuchar que nos dice ÉL al respecto, ya que podemos confiar plenamente en Dios porque El sí es un amigo verdadero que nunca nos ha de fallar.
Pra. Mónica Polanco
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